Sacaré a pasear la mente
fuera del espectáculo ajeno
al que asiste casi a diario.
Hoy podré
revisar mi tiempo y pintar
las manecillas
del reloj que lo mueve
y aparta de mi lado.
Hoy podré escribir letras
que golpean mi frente
y se desgarran por salir,
dolorosa Atenea
impugnadora de razones
y contradicción viva.
Hoy podré recordar quién venía
siendo estos últimos años
y hacia donde pretendía ir.
Y sólo hoy quizá recuerde
si recuerdo haber sido feliz
No hay comentarios:
Publicar un comentario