Entre los pinares hablábamos de planes, futuro y esperanzas, caminos de tierra de cultivos frescos, fresas, cebadas, trigos, azafrán y besos.
Tus miedos, mis miedos, las manos entrelazadas para hacer frente de frente al porvenir.
Separados días, juntas noches, frío el aire ¿como puede doler tanto el frío?
El aire ha ido barriendo las calles del pueblo helado donde ni los perros transitan la calle de arena esparcida y barro reseco en hielo.
Ser rural, ciudadano, esto es el mundo pero el mundo no es esto.
Chimenea y familia de cuatro amigos buenos sorteando la soledad, esquivando el sueño.
De semanas enteras de mecánicos hábitos desnudados entre nosotros buscando encontrados nuestros cuerpos.
Éramos otros en otros momentos.
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