Ultimamente ando preocupada, no sé si desde el desembarco de dineros y dinares jequesinos nuestros polític@s, y en breve también nuestros funcionari@s, o lo que quede de ellos y nosotros, habrán de hacerse con el atrezzo de Lawrence de Arabia, babuchas incluidas, y a partir de ahora los que clamaban por descubrir el rostro de aquellas mujeres que usan velos y telones de frente, acaben decorados y pertrechados tras de ellos, si hasta tantos ya disponen de los sacos de aquellos muchachos que se encontró Ali Babá.
Otra opción es la elegancia y la cirugía estética, otra forma de velo pero sin que lo parezca, el estiramiento de arrugas, surcos nasogenianos y borrarlos hasta del deenei,es realidad de algunos de nuestros notables y constable. que a ellos sí les consta que hay otra vida y es ésta, que a golpe de peluquería y marcas se tienen en cuenta a si mismos para su medrar presente y futuro. Y cuando hablo de vida, digo vida de padre y madre y muy señor-a mío-a.
¿Cuánta bisagra y besamanos no habrán de engrasar y ensayar a partir de ahora nuestros insignes, buques, dirigentes políticos y prohombres?
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