El pasado es una corriente
que regresa arrastrando
cadáveres flotantes y errores
que inundan el paso firme
que pensamos andar.
Todo composición
en nuestra defensa,
cualquier explicación
plausible que dimos
se rebana en guillotinas
públicas y juicios crueles
faltos de cualquier compasión.
El tiempo apremia,
ahora desconocidos
nos precipitan desde el lugar
que pensamos haber ganado.
Hechos desnudos, aislados,
salen a la luz cegadora
que no encuentra sentido
a nuestros actos,
nuestra composición de lugar
hueca y mortuoria
yace para siempre
en un panteón en ruinas
y las cenizas de nuestra mediana edad
esparcen lutos sobre nuestras cabezas
No hay comentarios:
Publicar un comentario