jueves, 6 de septiembre de 2012

Futuro Desviado

Reciclaje, seguros, sorteos, créditos e hipotecas, religiones, promesas electorales, planes de vacaciones y planes de jubilación: futuro sostenible le llaman.

Calor, única y eterna canción de un verano prolongado hasta la saciedad.

En el andén el sopor se mezcla con la prisa que queda ralentizada un día más. Periódicos gratuitos, algunas caras de sueño y hambre con ganas de volver, otras con sólo prisa, la prisa loca por llegar. todos extraños, todos ajenos desviando la mirada al paso, todos al vagón que enfila la vía ferrea apresuradamente. Otra estación, más viajeros. Subir, bajar.

El tren reanuda la marcha entre árboles, cuando el sonido de algún obstáculo pétreo y largo chirría entre sus ejes. Quizá un desprendimiento, un boicot, quizá ... Sí, en efecto, una vida que termina arrojándose a su paso, un cuerpo destrozado después de la mente rota que lo impulsa al fin y a su lanzamiento al paso de la máquina.

Y a la espera de los equipos médicos, los pasajeros del vagón se sumen en un silencio de miradas perdidas, perplejas e incomodas durante los primeros minutos. Nadie quiere creer aunque todos saben, hasta que la puerta del maquinista se abre para dejar paso al responsable de seguridad, apenas unos segundos para un cruce de miradas y rostros desencajados. Pasan los minutos y la espera es dolorosa, pues sabes que nada en absoluto se puede hacer cuando el futuro, siempre inexistente, ha variado su trayectoria de la predecible rutina envolviendo la dureza de la realidad en el eufemismo previsto de una actuación de emergencia en la realidad.

No hay comentarios:

Publicar un comentario